La ministra de Fomento, Ana
Pastor, ha recibido al alcalde de Huelva, Pedro Rodríguez, en la capital de
España. Allí, el equipo de gobierno del Ayuntamiento ha mostrado su interés
porque las infraestructuras de comunicación en la capital y la provincia se
mejoren considerablemente. Un encuentro que ha estado apoyado con la presencia
de la ministra onubense Fátima Báñez.
En la cartera de
reclamaciones estaba la apuesta decidida por el AVE entre Sevilla y Huelva, la
construcción del tercer carril en término onubense de la autovía A-49 o el
desdoble de la N-435 (carretera de la Sierra). Eso sí, el alcalde pidió a la
ministra que, mientras se ejecutan estas obras, se pueda mejorar sustancialmente
la comunicación ferroviaria entre Sevilla y Huelva con trenes lanzadera que
comuniquen ambas ciudades en 50 minutos, además de reclamar una conexión más
con Madrid en tren Alvia. Todas estas sugerencias han sido bien recibidas por
el gobierno de España que las planteará con el fin de mejorar la movilidad
(ciudadana, turística y empresarial) en Huelva.
Ya sabemos que son momentos
críticos para la economía española y que ahora resulta complicado llevar a cabo
obras en todo el país. Pero qué duda cabe que somos los onubenses los más
necesitados de un impulso en infraestructuras. Ya está bien de ser castigados.
Ya hemos pagado en los últimos años la discriminación con respecto a otras
provincias. En todas ellas hay algún proyecto en marcha. En Huelva, obra real,
ni una sola. Ahora no hay promesas incumplibles ni fechas falsas. Hay un
compromiso político y personal que deberá ser juzgado cuando llegue su hora. Al
menos, que no se hable de rascacielos de Calatrava o de tres puentes ya es un
paso hacía la credibilidad.
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